jueves, 5 de julio de 2012

LA VIUDA EMBARAZADA DE MARTIN AMIS

La viuda embarazada
Martin Amis
Editorial Anagrama, Barcelona 2011, 494 páginas.
 

   Novela polémica como suelen ser sus últimos escritos, tanto los de pura ficción ( House of Meetings ) como eses productos híbridos, entre el ensayo y el relato ficcional ( Koba the Dread ). Polémica que el escritor no tiene reparo en rehuir, sino que la atiza con sus declaraciones en contra de la revolución sexual de los años setenta y con comentarios muy peculiares sobre el actual feminismo ( “Las mujeres tienen hoy más poder de lo que es bueno para sus propias vidas” ). Pero, al fin y al cabo, novela de Martin Amis, el enfant terrible de las letras británicas, descubierto en la primera hornada de la revista Granta. Oscuro y desagradable para algunos críticos y lectores. Uno de los más perspicaces  escritores satíricos,  para otros. Traducida por eso mismo, y de inmediato, por Anagrama al español y por otros sellos editoriales a otras lenguas peninsulares.
   En La viuda preñada, historia de un trauma sexual según el propio autor, Martin Amis realiza su personal inventario de los naufragios y catástrofes de la revolución sexual de los años setenta. Estamos en efecto en el verano de 1970. El ayuntamiento carnal ya había dado comienzo siete años atrás, según el verso de Philip Larkin, con el que el escritor dialoga en la primera página de la novela. Ahora prosigue si cabe con más fuerza. En forma de tragicomedia, Martin Amis retrata la vida de seis jóvenes ingleses y norteamericanos, encerrados en un castillo italiano, una escenografía que es el tópico del placer hedonista para la cultura británica. Son los años del auge de la revolución sexual y aunque para Martin Amis la vida no es ficción – sólo Saul Bellow ficcionaliza bien las cosas reales – la novela tiene mucho de autobiografía, sobre todo en la primera parte.
   Ese antihéroe, Keith Nearing que seguramente está pasando el verano de su vida junto con chicas que se comportan como chicos y viceversa, semeja ser el propio Martin Amis, un rock star  en su juventud. Y Violet, la hermana más joven de Keith, es sin duda el alter ego de Sally, la hermana del propio escritor, víctima, en “su triste historia”, de esa revolución sexual. “Patológicamente promiscua” fue sacrificada por los efectos destructivos de una sociedad permisiva.
   La conclusión que extrae Martin Amis de estos veranos fulgurantes llenos de droga, sol y sexo, está anunciada ya en el mismo título de la novela, extraído de una cita del prerrevolucionario ruso Alexander Herzen: el mundo que fenece, las revoluciones no dejan tras de si un heredero, sino una viuda embarazada.
   A pesar de que el tema central de la novela es el repaso de los efectos perversos de la revolución sexual, Amis no rehúye otras reflexiones, como el narcisismo y el envejecimiento. Y como en todos sus restantes productos literarios, Martin Amis escribe en un inglés inimitable, lleno de ingenio, sutileza y un incomparable tono ácido y satírico.
Martin Amis
   Concluyo con una acotación. Acabo de señalar que La viuda embarazada es en buena medida autobiografía. Amis reitera una y otra vez que todo lo que en la novela narra es verdad (página 14). Todo menos Italia. El biógrafo de Martin Amis Richard Bradford (biografía no autorizada, hecho insubstancial para lo que pretendo decir)  ha revelado que esta historia de un grupo de jóvenes ingleses encerrados en un castillo para unas vacaciones de sol, sexo e introspección narcisista, ya había sido escrita como crónica autobiográfica por el propio Amis, en un artículo publicado en 1997 en el periódico “New Yorker”. Cambian los nombres de los personajes, pero son todos ellos perfectamente reconocibles. Y el escenario ya no es Italia, sino Francia.

Francisco Martínez Bouzas